La inagotable imaginación y profunda perspicacia artística de Xawery Wolski se ponen en manifiesto en cada una de sus obras, para las que el artista se sumerge en una reflexión sobre el tiempo y el espacio, buscando desentrañar la capacidad de la materia para convertirse en metáfora.
Irida y Arce toman su nombre de la mitología griega, en la que existieran dos entidades mitológicas compartiendo una honorable misión: la de portar los mensajes entre los dioses y los seres humanos. En sus viajes, estas deidades de nombres Irida y Arce, dejarían a su paso los arcoíris que unen los mundos y los entrelazan en una danza cósmica.
“Me interesa crear puentes de comunicación que permitan que el pasado y el presente aparezcan en unidad; y con la esperanza de que el diálogo en el tiempo y el espacio continúe para encontrar nuevas configuraciones.”
La plata, el noble material que caracteriza a TANE, refleja la luz con una elegancia sublime, dotando a cada eslabón de una suavidad envolvente. Los eslabones delicadamente moldeados y unidos revelan una precisión y una destreza que solo pueden ser alcanzadas por las manos expertas y la maestría artesanal de los orfebres de TANE. Las superficies pulidas y brillantes se convierten en un espejo que reflejan nuestra propia curiosidad y nos invitan a adentrarnos en los misteriosos recovecos de la obra. Es a través de lo reflejos cambiantes que Irida adquiere su naturaleza fascinante, casi como si estuviera en un constante diálogo con su espectador.
Elaboradas en plata .925, Irida en una serie de 24 ediciones y Arce en una serie de 4 ediciones estrictamente numeradas y limitadas.